Vivianayoga
cuando el cielo es nuestro limite
Me presento
Vive y transmite una pasión
Mi formación
Descubrí el Yoga basado en las enseñanzas de Swami Satyananda
en Uruguay en 1990. Esta escuela nos invita a tomar conciencia de todos los aspectos de nuestra personalidad desarrollando un profundo estado de introspección.
Desde entonces, mi sed de conocimiento de este mundo interior y sus sutiles y poderosos procesos siguió aumentando. Me parecía cada vez más claro que mi camino era la práctica y también la transmisión del Yoga, por lo que durante tres años me formé en esta Escuela para convertirme en profesora titulada.
En junio de 2000 me mudé a Fontenay aux Roses en el 92, y tuve la oportunidad de conocer Jocelyne Galland,
director del Yoga Center Nation en París y formado por el Sr.
Iyengar.
De ella aprendí la corrección de la postura y la calidad del movimiento alimentado por la delicadeza de la atención.
Mi acercamiento
El yoga se ha convertido en mi forma de vida y tengo el placer de transmitir esta pasión desde hace más de 20 años.
Propongo explorar la relación entre cuerpo, respiración y mente,
de manera muy accesible, logrando fácilmente el dominio de la respiración y momentos de meditación-introspección.
Siempre me atrae el profundo equilibrio que resulta de estas sencillas prácticas y que nos ayudan a estar presentes y manifestar nuestra armonía interior.
Creo que volver a sentirse fresco y despreocupado es fundamental y fundamental para una vida en plenitud. Me gusta disfrutar de la vida y en mi tiempo libre me dedico aesculturaen tierra, papel o bronce
La magia de una practica
contemporáneo, sutil y poderoso
Ofrezca a todas nuestras células la oportunidad de expresar su máxima inteligencia.
Con un profundo respeto por el cuerpo y sus innumerables capacidades, organizo mis clases en torno a una investigación
Integración holística del ser.
Mi intención es brindarles a los estudiantes un espacio donde la libertad de exploración esté por encima de todo.
En este proceso son necesarias la curiosidad y la amplitud de miras, así como una escucha atenta y un gran respeto y amor hacia uno mismo.
A través de
libertad de juego y exploración,
nos ofrecemos la posibilidad de evolucionar.
La práctica del Yoga se convierte entonces en una experiencia individual en la que todos progresan empujando sus límites, sin dejar de estar atentos a sus propias capacidades.
CUERPO
potencia, flexibilidad y adaptabilidad
Mi práctica se caracteriza por la conciencia y el trabajo profundo en nuestros diafragmas y músculos estabilizadores. Es un trabajo poderoso y transformador que se basa en la práctica de Bandhas, con el objetivo de manipular y dominar nuestras energías y fuerzas vitales.
De esta manera el cuerpo y la mente permanecen flexibles y adaptables y recreando vínculos con nuestro ser interior descubrimos nuevos recursos y nuevos puntos de vista.
Una vez conectado con la sabiduría del cuerpo, el gesto, alimentado por la respiración, da origen al movimiento y se convierte en una hermosa caligrafía en el espacio.
CONTROL RESPIRATORIO
conexión con todos los campos posibles.
Nuestro cuerpo recibe nuestro aliento más de 25.000 veces al día y, sin embargo ... apenas lo sabemos. Escuchemos nuestra respiración, seamos conscientes de ella: es cambiante, puede ser tímida o profunda, poderosa o frágil. Desarrollándolo
y dominarlo
mejoramos nuestro bienestar general.
Gracias al saber hacer milenario del yoga en el campo de la respiración,
tenemos una valiosa herramienta a nuestro alcance.
Estos espacios conformados desde el interior permiten que los tejidos, fascias y músculos recuperen su libertad de movimiento.
La respiración nos devuelve al momento presente y nos prepara para la meditación.

MEDITACIÓN-INTROSPECCIÓN
conciencia y libertad
La meditación es explorar en atención plena y benevolencia
las diversas facetas que nos atraviesan: impresiones, emociones, sensaciones, proyecciones ...
A través de la meditación:
Nos sumergimos en la quietud y el silencio que residen dentro de nosotros y nos volvemos a conectar con nuestras necesidades más profundas permitiéndonos ir más allá de nuestros patrones limitantes.
En estos momentos encontramos la sensación de quienes somos realmente.
Disfrutamos de respiraciones más profundas y naturales, y somos uno con el universo.
Y en este momento, por arte de magia, el mundo que nos rodea se convierte en un espacio de singular belleza.